Afortunadamente hay días que entre lo previsto y lo real no tienen nada que ver y hoy ha sido uno de ellos. El día comienza con el habitual desayuno y a la espera que nuestro amigo Gokul nos venga a recoger, ya que nos quería acompañar en nuestro día de compras. Creo que no estaremos lo suficientemente agradecidos a la ayuda que nos ha prestado durante estos días por Nepal.
Al final el dia de compras se nos da mejor de lo pensado y acabamos comprando varias cosas :que si una pasmina, unas faldas, unas camisas, unos pantalones, una talla ... y todo ello con la ayuda de Gokul que nos lleva a tiendas que conoce e incluso nos ayuda a regatear.
De vuelta en el hotel a la espera que nos venga a recoger el coche que nos va a llevar al aeropuerto, empieza a llover de forma que si llueve así cuando estamos en la calle nos hubiéramos calado en un minuto. Es la típica lluvia de esta zona : lluvias muy intensas pero cortas en el tiempo. Es una lluvia de tal manera que no nos hace envidiar para nada la cascada de las Islas Mauricio donde estuvieron Aida y Sergio la semana pasada, ya que en esos pocos minutos vemos una de igual calibre jejejejejj ....
Ya en el aeropuerto, en el que encontramos una señal un poco intimidante, aguantamos un retraso de 45 minutos, pero sobre todo los interminables controles que se hacen a los pasajeros ( uno incluso a pie de avión). Afortunadamente el vuelo se nos pasa rápido y casi antes de darnos cuenta nos presentamos otra vez en Delhi.
Aquí nos encontramos con la misión de coger un taxi sin la presencia de Aida y Sergio. Supongo que pagamos la novatada, ya que nos lleva un taxista que dice no conocer el camino de vuelta a casa y que cuando le preguntas algo se hace el despistado y te pone cara de chino. En fin, que por un recorrido que cuesta unas 450 rupias acabamos pagando casi 600.
Ya en casa, tenemos que tomar la decisión de quedarnos a cenar en la misma o salir a tomarnos algo. Aunque la decisión está muy reñida, al final decidimos salir a cenar fuera . Vamos a un local que bien podría ser de cualquier ciudad europea y en el que nos lo acabamos pasando bien que es lo importante.
Una vez terminada esta segunda etapa, podemos decir que Kathamdu nos ha encantado. Que es un sitio para volver otra vez con más tiempo para poder disfrutar de todo el potencial que tiene, y en el que el trato de la gente es espectacular .
P.S.: Todos tenemos sueños que la mayoría de las veces no se cumplen o son tan difíciles de cumplir que son prácticamente imposibles. Hay momentos en la vida que cuando tenemos un sueño, estamos tan cerca de cumplirlo y al final no se hace, es como si la vida quisiese ser injusta contigo.
Pero a veces, y sólo a veces, bien sea por suerte, por el destino, porque te lo mereces o simplemente porque sí, la vida te depara una sorpresa en forma de regalo.
Eso es lo que nos ha pasado a nosotros cuando volando para Delhi. Pensábamos que después de tres dias en Kathmandu y sin poder ver la cordillera mágica del Himalaya, de repente se nos ha presentado delante nuestra. Evidentemente no es lo mismo que verlo en el mismo terreno, pero este simple hecho ha provocado que nuestra estancia en Kathmandu hay sido prácticamente completa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario